El actual equipo de gobierno municipal prohíbe la grabación de los plenos, limita el uso de la palabra al grupo socialista en sus turnos correspondientes y ha llegado a impedirles formular ruegos y preguntas, los socialistas se plantean llegar a los tribunales si no cambian de actitud.
En las últimas sesiones plenarias de Puebla de Almenara, el equipo de gobierno encabezado por el alcalde ‘popular’ Javier Ramírez, ha restringido el uso de la palabra a los concejales socialistas y se han finalizado las sesiones sin permitir ruegos y preguntas, hechos que desde el PSOE de la localidad consideran “muy graves” porque afectan a la función esencial del pleno municipal, que debe, ser ante todo, un órgano de representación política de todos los partidos elegidos democráticamente. Lamentan que el alcalde haya decidido actuar de una forma tan autoritaria.
“Prohibir la grabación de los plenos, no desarrollar todos los puntos o no dejar intervenir en los turnos de palabra correspondientes, son irregularidades que incumplen la Ley y la Jurisprudencia”, así lo afirma el portavoz socialista, Nemesio Rozalén, que considera contrario al sentido común y a los valores democráticos no permitir en un ayuntamiento el debate y la conversación.
“No nos dejan intervenir, ni preguntar, y si lo hacemos nos apuran para terminar”, afirma Rozalén, que se pregunta “qué clase de democracia es esta”.
A estas actitudes “caciquilies” se suman irregularidades administrativas y es que, explica Rozalén, tras un año de gobierno popular, en el pleno de mayo se dio cuenta por primera vez de las resoluciones de alcaldía, “algo obligatorio que no se ha hecho hasta esta fecha, a pesar de haberlo solicitado de forma insistente”. Un hecho que fue justificado alegando desconocimiento. Rozalén lamenta que en lugar de demostrar “humildad” ante un error, el alcalde prefirió dejar patente su soberbia afirmando textualmente -aquí el que manda soy yo-.
La suma de irregularidades un pleno tras otro ha llevado a los socialistas a presentar recursos al consistorio solicitando la anulación de los puntos del pleno en los que se han cometido esas faltas, estos recursos no han sido resueltos, ni sometidos a votación, y el plazo para hacerlo se ha superado “sobradamente”. Ante esta situación, Rozalén asegura que no les gustaría recurrir a los tribunales, “pero la actitud autoritaria del alcalde y del equipo de gobierno no nos dejan muchas más opciones”.
Considera Rozalén que no pueden dejar pasar estas anomalías que perjudican principalmente a los vecinos de Puebla de Almenara, “que no pueden ser representados adecuadamente”.
“Tenemos el derecho y el deber de ejercer nuestra labor de oposición y no nos lo permiten”, concluye el portavoz socialista, que pide al equipo de gobierno que actúe de manera transparente y democrática.